de Miguel Ramos
…..En un copo de nieve , la ciudad de México se mueve, y entre obras de Metrobus y tren suburbano, termina labores el Senado. Cantan las comunas villancicos en las pistas de hielo buscando no contagiarse con tantas puestas de patín, de hongos los dedos. Y los letreros de cantidad de habitantes ahora son digitales, indicando hacia arriba o hacia abajo el número de mortales. Así el Grinch la Navidad observaba, mientras en su guarida hedionda su maldad planeaba. En San Martín un ducto explota, seguro fue porque en la extracción clandestina de combustible, las autoridades mismas metieron la manota. Vallejo cerrado, igual que Ermita, el entronque de Indios Verdes, Cuauhtémoc, División del Norte y Consulado. Para estar alegres, en el 2011 la tenencia verde, pagarás por cilindraje, no por el modelo, ni dependerá del Ralenti, ni de la mordida, ni del Kilometraje. El año de campaña, de destapes, de arrebates, vuelve a México un campo de batalla. Más el Grinch en su amargura dejo entrever que la disputa va siempre disfrazada, pues saltar de bancada en bancada hace que se los cargue la …..ruta bicentenario casi terminada, del porciento completo solo el treinta aunque prometido está que para el año entrante la palabra de moda será el levante. Desde el palacio de gobierno las doce campanadas , en los pinos de atún las empanadas y en el centro de Iztapalapa la verbena en su esplendor, al igual que en la Carranza, en la Hidalgo y la Obregón. El Grinch tras la ventana espera la torta de pavo, la mezcolanza de manzana y el salado bacalao, tiene que los regalos esconder para que la gente entiende el significado de su ser. Pero haciendo tiempo mientras la ciudad de la esperanza duerme, agarra un pomo de vidrio verde, quiere encontrar el fondo y toma y toma , siente calor en la frente , pero de súbito advierte que lo espían de la casa de enfrente, serán narcos o serán agentes?. Tambaleante toma su bolsa de Santa Claus, y de un brinco al primer piso y de un segundo a su trineo veloz. Ahí se relaja y de café toma una taza, se muere de frío y no es para menos porque aunque quiere, con el temblar de los dientes no dice ni pío. Camina en cornisas y al ver la realidad de la plaza se echa de espaldas y muere de risa, trabajo no habrá, desquicio tampoco pues lo que intenta destruir en pocos hogares parece persistir, y de la nada se vuelve loco. La tristeza lo embarga, y un gigante nudo se le forma en la garganta. De dolor se agarra el pecho, de rodillas se dobla, y la fiebre sin piedad dos neuronas le revienta. Se incorpora y sale despavorido, en ciudad QUIEN si encuentra para destruir un motivo….. porque en el DF y sus regiones aledañas no encuentra más que solo una opción….. vivir con muchas, muchas agallas!!!!!
Felices fiestas!!!!!!
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